Desde siempre ha sido muy importante la apariencia física, verse bien, estar bien, quererse y hacer todo lo posible por dar la mejor impresión. Y en nuestra Saga Twilight eso es una prioridad: los vampiros son ejemplos de hermosura y perfección en cada milímetro de su cuerpo.
Dentro de esta historia es indudable que las actrices son excepcionalmente hermosas, al igual que los varones. No en vano se hizo un casting cuidadoso para elegir a las personas que pudieran cumplir con los estándares físicos marcados por Stephenie en las novelas, y hoy tenemos en el cast a una importante cantidad de modelos. Pero, ¿quién de estas damas sabe presumir mejor su belleza? ¿Quién se sabe sacar partido, quién luce mejor esa hermosura? Nuestro objetivo de hoy es entregar la corona al Mejor Estilo a una integrante de la Saga.
Empecemos con la protagonista. Kristen Stewart es muy, muy bonita, con una figura naturalmente buena en la que destacan sus piernas. Sin embargo, su incondicional amor a las fachas, principalmente a Vans y Converse, consiguen ocultar su hermosura debajo de prendas viejas y enormes; aunque son bastante cómodas, la mayoría de ellas nos hacen regresar a la era de Kristen tomboy, sus años de preadolescencia en los que fácilmente se le podría confundir con un varoncito. Sabemos que no es muy parcial a los tacones, y que descubre qué se va a poner cinco minutos antes de salir. Si los increíbles vestidos de Stella McCartney, Elie Saab, Monique Lhuiller, o Carolina Herrera lograran quedarse en ella y transmitirle las ganas de arreglarse como la reina que es, grandes cosas ocurrirían.
Kristen es quien más cambia su aspecto entre la vida diaria y los eventos especiales.
Desafortunadamente hasta ahora los looks con los que desfila en las alfombras rojas y eventos dan completamente la impresión de haber sido armados por alguien más, y aunque por supuesto cuentan con la aprobación de Kristen sería conveniente que ella se involucrara más en el gusto y la creación de cada uno. Tiene rasgos extraordinarios, como piernas, ojos y cintura, que si ella valorase más, y si confiase un poquito más podría mejorar considerablemente.
Ahora bien, Ashley Greene. Ashley ha tomado clases de modelaje desde los catorce años. Sabe perfectamente cuáles son sus mejores ángulos, cuáles son sus puntos fuertes, cómo sacarse provecho. Sabe posar, sabe cómo vestirse de acuerdo a cada ocasión. Por si fuera poco, cuenta con un tipo de belleza tradicional y ampliamente reconocido: alta, delgada, de rasgos finos. Pero justo porque tiene todo este conocimiento, ¿no parece a veces que se pasa? Ashley tiende a sobre usar sus herramientas y por lo tanto a verse exagerada. Más de una vez me he topado con una imagen suya y no puedo evitar preguntarme si no está un poquito sobrecargada. Si se topa con una cámara es notorio que sus poses son muy estudiadas, y eso empieza a darle toques artificiales. Jamás una prenda que no sea de marca, cada vez un peinado distinto, varios colores de cabello y extensiones, accesorios y otras cortesías de las numerosas marcas que promociona. Nadie podría decir que no se ve preciosa, sin embargo se agradecería tanto un poco de estabilidad en su físico (tinte de cabello, por ejemplo) y que recuperase un poco de espontaneidad.
Quizá el punto es que debería ser más natural. Tiene buen gusto, debería dejarse llevar un poco más por sus instintos. Es obvio que piensa muchísimo antes de escoger una prenda o un outfit, por lo que romper estructuras algún día sería sano.
Digamos que Kristen y Ashley son los extremos: no saber (o no querer) lucirse en todo su esplendor, y exagerar. Lo mismo podría Kristen enseñarle a Ashley la magia de los tenis con vestido corto que Ashley a Kristen a reconciliarse con faldas y vestidos, y que éstos no sean usados sólo cuando hay que ir a alguna gala, sino que realmente se incorporen a su vida.
Nikki y Elizabeth se admiran mutuamente durante la premiere de Eclipse en LA.
Pero continuemos en nuestro viaje hasta llegar a Nikki Reed. Ella es un caso muy interesante. El suyo es un estilo alternativo, hippie a veces, pero que sabe transformarse en el de una diosa para las alfombras rojas. No tiene ninguna dificultad para hacer la transición entre bohemia y chic, y saca adelante los estampados sin problema. Que si los neones. Que si los cortes asimétricos. Que si el diseñador más famoso o el que apenas abrió su boutique. Lo que sea que venga a la mente, Nikki lo ha usado exitosamente. El problema de Nikki reside en que de vez en cuando tiene problemas con su peso. En la complexión de Nikki eso es notorio en brazos y rostro, que de por sí son áreas bastante complicadas; a consecuencia de esto varias elecciones acertadas de ropa quedaban mermadas. De tanto en tanto es posible verle algunos kilitos de más, que por supuesto afean cualquier look. Esto se notaba más antes de que se casara, pero afortunadamente Paul la ha motivado y ha sido una influencia muy buena en todo lo que es Nikki: ahora se ve mejor que nunca, con una silueta estilizada que se lleva perfectamente con su belleza natural.
Elizabeth Reaser es una mujer que no toma riesgos. Tiene ya ubicada una zona de confort tanto en su cuerpo como en su forma de vestir: cabello, estilo de vestidos, poses para fotos, etc. Está bien, porque así no se pierde en experimentos, está consciente de su edad (digo, no está vieja pero tampoco tiene quince años) y logra verse guapa, atractiva y a la moda. Quizá una que otra vez podría animarse a correr algún riesgo; sin embargo en este momento luce bastante, bastante bien. Punto para Liz por su buen estilo.
Dakota es otra que tiene ya definida su identidad en términos de apariencia física. Dio perfectamente el salto de niña pequeña a adolescente, y tuvo la inteligencia de no demostrar que había crecido mediante desnudos y looks estrafalarios. Siempre se ha vestido bien, y la imagen que decidió mantener es una de extrema feminidad, que va perfectamente con su complexión suave y esbelta. Su cabello largo, lacio y rubio, su cara despejada y clara, vestidos en tonos suaves cuyo corte beneficia a su silueta. Una apariencia inocente mas no Lolita, sino muy de acuerdo a la edad que tiene. Cuando va de gala escoge telas vibrantes, jóvenes, vivas, alegres, y es una de las pocas que sabe ir casual sin ser fachosa –lo chic es lo suyo. Dakota es indudablemente una de las actrices de la Saga que mejor sabe aprovecharse y lucirse, que conoce su belleza y que se quiere.
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